Salir
Por Luis Peralta
Últimamente estoy escuchando alguna que otra extraña historia rocambolesca (¡toma adjetivos!). De esas historias que directamente te dices «cómo se puede aguantar eso». Todavía no tengo una opinión totalmente formada (pero si espero a tenerla quizá no escriba absolutamente nada), aunque me da que tiene que ver con la espiral de destrucción.
Este término, si así se puede llamar, lo empecé a utilizar hace años referente a las relaciones de pareja (después de otro tanto tiempo de reflexión, porque lo entendí con aquella que yo tenía): aquello que sucede cuando uno se va comiendo la vida del otro y el otro la de uno, se va ciñendo poco a poco la espiral, hasta que se llega al centro. Y entonces algo estalla. Pero no pasa solo con las relaciones de pareja y, de hecho, nada tienen que ver las últimas que me han estado contando.
¿Qué es aquello que hacer ver a uno que algo no tiene importancia, que más vale mantenerse fuera o lejos de determinado asunto, que no vale la pena? Dudo que tenga que ver con el coeficiente intelectual, aunque algo pueda tener que ver. Yo lo llamaría capacidad o habilidad para relativizar , para saber si estamos entrando en una espiral de destrucción o no.
Siempre es más fácil ver la paja en el ojo del otro. Y puede que ahí tengamos alguna pista sobre cuándo uno es capaz de relativizar: cuando se es capaz de ponerse en otra situación y evaluar una situación desde otro punto de vista. Desde fuera.
Al final todos caemos alguna vez en alguna espiral de destrucción (el que escribe ha tenido tendencias autodestructivas a razón de echar un vistazo al pasado). Aprender o no de ello es la cuestión. El tema es que yo sólo estaba viendo la paja en ojo ajeno y me ha dado por pensar…